Los instrumentos de evaluación son herramientas de las que nos ayudamos para obtener información precisa sobre el logro de los objetivos de aprendizaje y sobre la calidad del curso de capacitación.
La importancia radica en que estos instrumentos deben de evaluar si realmente se está cumpliendo con el objetivo, así como cuál es el nivel de aprendizaje de los y las participantes en el curso de capacitación.
Un criterio importante para realizar los instrumentos de evaluación es verificar que tengan correspondencia con los objetivos de aprendizaje planteados en el curso de capacitación.
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Los tipos de evaluación del aprendizaje se dividen en tres de acuerdo con su funcionalidad y temporalidad como se explica a continuación:
1. Evaluación Inicial o diagnóstica
2. Evaluación Continua o Formativa
3. Evaluación Final o Sumativa
Identifica el grado y nivel de conocimientos que tiene el grupo respecto al tema que se va abordar y permite hacer ajustes al momento de impartir el curso. Se aplica al inicio del mismo.
Identifica el avance de los aprendizajes y verifica el grado en que se están cumpliendo los objetivos. Proporcionan información permanente para adecuar el contenido y hacer los ajustes necesarios, este tipo de evaluación se aplica durante el desarrollo del curso.
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Identifica los logros finales del aprendizaje y se lleva a cabo al término del curso.
La evaluación se concibe como un proceso porque se practica desde que inicia el curso hasta que finaliza, por ello es importante diseñar una estrategia en diferentes momentos que permita obtener información sobre el avance del proceso de aprendizaje de las y los participantes.
Para realizar tus instrumentos de evaluación te recomendamos definir los aprendizajes que quieres evaluar de acuerdo con los dominios de aprendizaje, que se clasifican en tres:
I. Conocimientos: El instrumento más utilizado son los exámenes escritos, en modalidad de cuestionario el cual contiene una serie de reactivos con la finalidad de evaluar el aprendizaje a nivel cognoscitivo.
II. Habilidades o destrezas: Se requiere que la persona evaluada elabore el procedimiento empleado a través de un conjunto de pasos para llegar a un resultado o un producto que demuestre el aprendizaje adquirido, es primordialmente una tarea de ejecución que evalúa por ejemplo:
a) Impartir un Taller de Sensibilización en género para certificarse en el ECO308.
b) Entregar el Informe de evaluación de la capacitación del taller impartido para lograr la certificación en el ECO308.
Los instrumentos más utilizados para este tipo de evaluación son:
la diferencia entre uno y otro instrumento es que la guía de observación se aplica in situ, es decir en el lugar mismo dónde se despliega la habilidad o destreza a evaluar, mientras que la lista de cotejo puede utilizarse en un momento y lugar distinto al que se fijó para la entrega del producto.
III. Afectiva/actitud: Para evaluar conductas del área afectiva o actitudinal se utilizan instrumentos basados principalmente en la observación de mayor duración. Las técnicas de observación tienen como finalidad describir y registrar sistemáticamente las manifestaciones de la conducta de la persona a evaluar y se utiliza, por ejemplo, una escala estimativa.
Recuerda tus instrumentos de evaluación deben ser coherentes con la estrategia que enunciaste en tu Plan de capacitación.
La redacción de las instrucciones son una parte fundamental para el desarrollo de los instrumentos de evaluación, cuando están realizadas de una manera coherente y sencilla los y las participantes que contestan los formatos las comprenden mejor.
También te recomendamos que los enunciados escritos cumplan con estas tres condiciones:
Para finalizar y probar tu instrumento puedes hacer un ejercicio de aplicación con una persona para verificar que tus instrucciones sean entendibles.
Un reactivo se puede definir como una pregunta a contestar, una afirmación a valorar, un problema a resolver o una acción a realizar, hace evidente el nivel de aprendizaje alcanzado por las/los participantes, es el estímulo del cual se espera una respuesta que pueda ser calificada. Su importancia radica en que a través de estos enunciados se valora si los y las participantes aprendieron los contenidos, habilidades, destrezas esperados durante el curso de capacitación y permite identificar si es necesario redefinir ciertas preguntas o reactivos para medir de una mejor manera el aprendizaje.
Para diseñar un instrumento la primera pregunta a contestar es ¿qué se quiere evaluar?, lo cual implica:
1 Identificar los indicadores de aprendizaje o satisfacción que se quieren evaluar y vincularlos directamente con los objetivos planteados,
2 Posteriormente convertirlos en reactivos,
3 Establecer la forma en que habrán de contestarse los reactivos,
4 Otorgarles una valoración,
5 Definir el puntaje mínimo para considerar que se ha alcanzado el objetivo.
Para la elaboración de los reactivos te recomendamos:
Puedes revisar el ejemplo del Instrumento de Evaluación de los aprendizajes que se encuentra en la sección Materiales de tu barra de herramientas , para que identifiques cada uno de los criterios de evaluación descritos.
Al finalizar el proceso de elaboración de los reactivos es conveniente verificar:
Para profundizar en el tipo de reactivos descarga el siguiente documento dando clic aquí.
Tus instrumentos de evaluación deben ser coherentes con la estrategia que enunciaste en tu Plan de Capacitación. También es necesario que utilices un lenguaje sencillo para las personas participantes, es decir que la redacción de tus reactivos e instrucciones sean claros y sencillos.
Cada reactivo debe referirse a una sola característica a evaluar, es decir, una pregunta a la vez para valorar puntualmente el aprendizaje.
Te recomendamos también que cada reactivo contenga una sola respuesta, de esta manera te será más fácil determinar la ponderación si una respuesta es correcta o incorrecta.
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